PolicÃa investiga si âpeperasâ están detrás de la muerte de camionero
Restos del conductor fueron hallados dentro de una zanja en el kilómetro 7 de la carretera de penetración a Chavín, en Chincha
En la muerte del camionero Carlos Alberto Vera Chong, de 63 años, estarían involucradas trabajadoras sexuales que operan en la carretera Panamericana Sur.
La policía mantiene esta tesis debido a que el cadáver de este hombre, que fue hallado en el interior de una zanja, en el kilómetro 7 de la carretera de penetración al distrito de Chavín, “no presentaba lesiones corporales” por lo que se presume que “fue víctima de envenenamiento o ‘pepeado’”.
Según las investigaciones, Vera Chong, había salido desde la provincia vecina de Pisco transportando herramientas metálicas con dirección a Lima. El sexagenario, conductor del vehículo, de placa D3U - 890, se reunió con otros transportistas en un restaurante que está ubicado en el kilómetro 179 de la red vial.
Testigos sostienen que en este lugar, el occiso entabló conversación con una mujer con quien salió del local y se dirigió a su camión. La policía, identificó el local donde se alimentó el camionero, así como a la fémina que lo acompañaba. Ella contó que era su pareja y que estuvo con él durante la noche del día 2 de junio. Al siguiente día, el chofer desapareció.
El vehículo fue hallado varado en la red vial. En el interior se encontró las llaves del camión, uno de sus zapatos, documentos personales y otras especies.
HALLAZGO. El día 3 de junio, al promediar las 13 horas, se confirmó que Carlos Vera había muerto. Sus restos habían sido arrojados en una zanja. Peritos de la policía, en presencia del fiscal de turno Gustavo Gonzales y el médico legista Luis Rojas, comenzaron con las diligencias de ley. Se evidenció que el cuerpo estaba semidesnudo. Asimismo, se anotó que el occiso no tenía signos de haber recibido maltrato físico.
Se presume que el camionero cayó en las garras de las trabajadoras sexuales que “pepean” a los incautos parroquianos para despojarlos de su dinero y pertenencias. Estas, luego de percatarse que su víctima había muerto, en complicidad con otras personas, habrían transportado el cadáver, hacia el ingreso a la serranía de Chincha para deshacerse del camionero. Las investigaciones policiales continúan para descifrar quienes están inmersos en este crimen.